Los Pasajeros
Era un otoño de días blanquísimos,
llenos de pérdidas de extravíos
Era el DF con los Pasajeros en mi casa
en la cocina de mi casa
arrancando páginas de antologías
de poetas no queridos.
De discos de microondas como ceniceros
de platos plásticos como discos de microondas
de basura plástica como platos
como muebles
comida y cena.
Los Pasajeros diciendo Nina! Nina!
yo echándolos fuera de la casa
Los Pasajeros tatuando guitarras blancas en el pavimento,
yo intentando apagar las voces
entrar en el silencio, morir sin impacto.
Afuera se están matando
adentro podemos solos,
mis Baskiat, todos mis Baskiat,
podemos solos.
Comentarios